Llegando a Londres

Este es mi primer post en el mundo de Blogger y estoy verdaderamente nervioso. Londres es casi tan bello como los recuerdos que tengo de la primera vez que me lancé al ruedo con las riendas de mi vida guardadas en un cajón. Y ahora me encuentro en una legion desconocida con una mujer que nunca más será la misma de la que yo me enamoré perdidamente hace algunos años. Dormiremos en camas separadas, en habitaciones contiguas, con desordenes en la memoria muy parecidos.

Viviré al lado del enemigo, hasta que el destino marque un nuevo una nueva pauta ¿Cierto?

Gracias por los canapés y la champaña robada de tu ex trabajo Patricia, ya tendremos mucho de que hablar.